LA
PARTE QUE FALTA
De
Shel
Silverstein
La parte que falta
estaba sola
esperando que
alguien llegase y la llevase a algún lado
Algunas encajaban,
pero no podían rodar.
Otros podían rodar,
pero no encajaban.
Uno no tenía ni
idea de encajar ,
y otro no sabía
nada de nada.
Uno era demasiado
delicado,
uno la puso en un
pedestal
y en él la dejó.
A algunos les
faltaban demasiadas partes,
otros tenían
demasiadas partes,
Aprendió a
esconderse de los hambrientos.
Llegaron más.
Algunos vigilaban
demasiado cerca,
Otros pasaban de
largo sin darse cuenta.
Probó a volverse
más atractiva.
No funcionó.
Lo intentó siendo
más llamativa,
pero eso solo asustó
a los tímidos.
Finalmente llegó
uno que encajaba perfectamente,
pero de repente…
¡la parte que falta empezó a crecer y crecer!
- “No sabía que
ibas a crecer”
- “Yo tampoco lo
sabía” –dijo la parte que falta
- “Voy a buscar a
la parte que me falta, una que no vaya a crecer. Adiós…”(llorando
ambas)
Y un día, llegó
uno que parecía diferente.
- “¿Qué quieres
de mí?” Preguntó la parte que falta.
- “¿Qué
necesitas de mí?”
- “ Nada”,
contesto.
- ¿Quién eres tú?
preguntó la parte que falta.
- “Soy la Gran O”
- “Creo que eres
el que he estado esperando”- dijo la parte que falta- “¿Tal vez
yo sea la parte que te falta?”.
- “Pero a mí no
me falta ninguna parte. Aquí no hay ningún sitio donde puedas
encajar”- dijo la Gran O.
- “¡Qué pena!
Pensé que quizá yo podría rodar contigo”
- “No puedes rodar
conmigo, pero tal vez puedas rodar por ti misma”.- dijo la Gran O.
- “¿Por mí
misma? Una parte que falta no puede rodar por sí misma”
- “¿Lo has
intentado alguna vez?”
- “Pero tengo
esquinas puntiagudas, no estoy hecha para rodar”
- “Los picos se
quitan y las formas cambian. De todas maneras debo decirte adiós,
tal vez nos veamos de nuevo”
…y se fue rodando.
La parte que falta
se quedó sola otra vez.
Durante mucho tiempo
simplemente se quedó ahí sentada.
Entonces, despacio,
se elevó sobre sí misma y dio una voltereta.
Entonces se levantó,
empujó y cayó y empezó a moverse hacia delante,
y pronto sus bordes
comenzaron a desaparecer.
Levantar, empujar,
caer,
levantar, empujar,
caer.
Y su forma empezó a
cambiar.
Y entonces estaba
chocando en lugar de cayendo.
y después botando
en lugar de chocarse,
y rodaba en lugar de
botar.
Y no supo hacia
dónde, y no le importó ¡Estaba rodando!
….Paz….
Referencia:
video:
La
parte que falta conoce a la Gran O (subtitulado)
Comentario de soraya
sanchez
JIBZ